miércoles, 4 de julio de 2007

Respuesta de un tal Gerardo a Ugo Rincón, o la lucha por el Orgullo

En contra del espíritu de este blog que supone que no hay nada nuevo que decir, aquí como Carlos Monsiváis y Octavio Paz (pero de las nuevas generaciones, toda proporción guardada), nadie quiere ser el penúltimo en hablar. Debo decir en todo esto que mi única guerra con plumas y con conciencia, con militancia y con crítica, con parte y con partido, es en contra del cóset, abominable tecnología de dominación y miedo. Y no por mí, ni por Ugo, ni por Gerardo, ni por Madrid, ni por San Francisco. Por México y los niños adolescentes que hoy por hoy no tienen derecho a la normalidad sexual y consecuentemente educativa, política, religiosa, simbílica, emotiva y psicológica. Ellos sí me duelen. Como dijeran Llamas y Vidarte en sus Homografías: Dan mucha pena los niños en las cárceles, pero a nadie se le cae una lagrimita por los niños y adolescentes metidos en el armario. La misma hipocresía de siempre.


Yo cuando tenía 17 años ví por casualidad la Marcha pasar por Paseo de la Reforma. Y ver a miles caminar sin miedo, me quitó a mí el miedo. Y no hay nada más libertario que dejar de temblar debájo de las sábanas. En la siguiente entrada transcribo del mismo libro que cité arriba las Lecturas de los Derechos del Niño y de la Niña que le dieron razón a mi resistencia personal. Dijeran Burr, Canales y Piñó en su Cuaderno para el Ciudadano en Apuros resistir es poner la razón al servicio de la rabia. No hacemos otra cosa mas que eso aquí.


En fin, va Gerardo a continuación en una réplica feroz que hace touché más de una vez a los argumento de Ugo sin H. Quise respetar la propuesta y así, va Gerardo transcribiendo la carta de Ugo y deteniéndose a cada párrafo para rebatir, en negro Ugo, en rojo Gerardo. Juzque Usted, querido blogvidente, y saque sus propias conclusiones. ¿Volverá Ugo a la carga a responderle a Gerardo? ¿Alguién más meterá su cuchara en esta polémica epistrolar? ¿Algún día alguien reconocerá el altísimo nivel literario de mi crónica que nadie pela por estar más atentos a las desaveniencias Ugo versus Gerardo? ¡Todo esto y más en nuestro próximo episiodio de La lucha por el Orgullo!

Muchas gracias por participar, Gerardo. El próximo año vamos juntos a la marcha. Quien quita y para entonces ya convencimos a Ugo de que vaya, al menos a mirar.



Gerardo,

La “marcha del orgullo gay” se ha quedado apantanada. Sus orígenes de protesta contra la discriminación y las violaciones a los derechos humanos más retrógradas están sustancialmente en el pasado. Hoy las manifestaciones están nutridas por un grueso sin conciencia sobre el “objetivo”.

Ugo,

Me parece nuevamente que reduces las expresiones de protesta a lo actos de conciencia y/o de militancia política, debemos entender que hay infinidad de expresiones que son una protesta en si, que son políticas en si sin necesidad de enarbolar banderas “políticas”, y respecto a tu decir de que hay “un grueso sin conciencia” participando en la marcha, considero que por principio de cuentas no podemos pretender que en toda manifestación vaya un 100% de personas con conciencia del objetivo y segundo me parece que descalificas el hecho de que alguien vestido de plumas y lentejuelas no tenga esa “conciencia” sólo por su atuendo.

La participación social se debe reconocer como un proceso de ejercicio de ciudadanía que nos acerca a la democracia y nos encamina al progreso, alejándonos de la ignorancia y otras chingaderas. Empero, cuando la gente sale a manifestarse en las calles, se dice que “toma partido”, igual que cuando se expresa a favor o en contra de cualquier cosa. Esa participación es apenas un escalón en la construcción del ejercicio legítimo de los ciudadanos. Cuando la gente ‘toma parte’ tiene la conciencia para discernir sobre cualquier cosa; tomar partido y entonces encontrar una manera para involucrarse en su contexto de manera activa y concienzuda,

Efectivamente la participación social “debiera ser” un ejercicio de ciudadanía, pero en ese deber ser, el ejercicio de la ciudadanía toma muchos derroteros, no solamente la militancia partidista o panfletaria, el ejercicio de la ciudadanía seguramente no es sólo votar y participar en algún grupo político, va mucho más allá y se puede expresar en cualquier otro espacio. Respecto al pretendido camino al progreso, te pregunto qué es para ti eso que llamas progreso, porque ciertamente esa idea ha sido superada, la historia no ha demostrado como no hay tal progreso, aunque en su nombre se haya acabado con culturas milenarias, esgrimiendo el argumento de que eran salvajes e ignorantes. Ahora respecto de tu aseveración de que existen grados o escalones en la construcción de un ejercicio “legítimo” de la ciudadanía, te reitero que hablar de lo legitimo y lo ilegitimo es arengarse el derecho de decir qué esta bien y qué mal, no Ugo, el ejercicio “correcto” de la ciudadanía no puede hablar de legitimidades, puesto que debiera buscar la inclusión de todas las formas de expresarse, validando todas esas maneras de involucrarse en un contexto –el que sea- de manera activa. Sobre la conciencia, vuelvo sobre lo mismo, que lleves plumas y lentejuelas o vayas con tus senos al aire no te hace tener menos conciencia.

No basta tomar partido Gerardo, no basta que la gente diga eso es bonito o feo y salga a la calle, Necesitamos ciudadanos capaces de involucrarse con su contexto y que tomen parte. Que no se queden con la satisfacción de haber salido a manifestarse en las calles; cuando su voz será callada por medios de comunicación controlados por la oligarquía.

Y yo te pregunto Ugo por qué no basta, por qué hay que llegar a casa y volverse un activo militante de una causa, y por qué pretendes que sólo la militancia es tomar parte… porque según yo, se puede tomar parte y formar parte de algo sin militancia, y ahí interviene la conciencia de la que hablas antes, no necesitas estar o formar parte de algo organizado para tener conciencia y actuar en consecuencia.

La marcha hoy es un ejercicio catárquico, con un movimiento político de dudosa calidad y dudosos resultados. Mi cuestionamiento no es represor contra la Marcha Gerardo, es una crítica constructiva al desperdicio energético que tendrán los manifestantes. Es una crítica a que después de celebrar orgullosamente que nacieron y decidieron ser homosexuales, lesbianas, bisexuales o el estilo de vida (y sexual) que sea; se sientan satisfechos por haber tenido la oportunidad de manifestarse con libertad y no hagan nada más, no se involucren en los mecanismos más eficientes para generar políticas públicas que abatan la violencia ni tampoco en la generación de leyes que la controlen.

Vuelvo a lo mismo Ugo, no limites lo político a la militancia partidista, puesto que cualquier expresión de disidencia, sea cual sea, es política, así que cuando reduces tu concepto de lo político a aquello que sucede en el ámbito de los partidos políticos lo vuelves un concepto reduccionista, sobre lo de los dudosos resultados, habría que ver si es que alguien espera resultados, y si es que estos se pueden observar a simple vista. Y bueno, no entiendo eso de tu crítica constructiva, me parece fuera de lugar el arguemnto, finalmente cada quien decide la manera en que “desperdicia” su energía. Y bueno Ugo dime tú cuántas de las 100 mil personas que te acompañaron el domingo en la marcha están ahora involucrándose en mecanismos “más eficientes” para generar cambios ¿?

Cuando critico me siento con la legitimidad para ello porque me respalda el que en mi vida diaria intento que las condiciones de vida para la gente LGBT, niños, ancianos y demás sean de mejor calidad y se acerquen a los niveles mínimos de dignidad humana Gerardo.

Te reitero que hablar de lo legitimo y lo ilegitimo es pretender que estás en un plano superior a los demás, y no, porque que tú tengas la conciencia de eso que haces no descalifica al que hace lo mismo sin conciencia o al que teniéndola no lo hace activamente.

Cuando critico al PRD lo hago porque no soy un ciudadano que sencillamente lanza acusaciones y desacredita la labor de grupos e individuos dentro de nuestra organización política; me respalda el que al menos intento involucrarme al interior del Partido para construir uno más moderno.

Si, y que tú seas militante de un partido no obliga a que todos lo sean, no encuentro el punto aquí, puesto que me parece que tener conciencia de tu realidad no obliga a militar en un partido político y militar en un partido político tampoco es garantía de tener esa conciencia que dices.

Cuando un movimiento político no tiene la visión para enfrentar al sistema sin ser comprado por este, merece mi respeto. Acuérdate de los hippies cuando VW les vendió los coches que eran “parte del movimiento contracultural”, cuando la industria textil les confeccionó la ropa, cuando sus hijos se volvieron yuppies. Acuérdate cuando el PAN se volvió populista y creó el Seguro Popular y ahora hay pensión para adultos mayores (convertida en ley por legisladores y cacareada por el ejecutivo). Acuérdate de la marcha gay que exigía respeto y políticas públicas de respeto a la integridad humana y hoy son carnavales dirigidos por empresas que en poco o nada se han comprometido a ejercer presión al sistema para lograr los cambios que requiere una sociedad tan jodida como la nuestra Gerardo.

Pues podrías explicarme de nueva cuenta esa primera línea porque me es bastante confuso (cometario del Blogger: creo que Ugo erró la redacción y quiso decir "cuando un movimiento político no tiene la visión para enfrentar al sistema sin ser comprado por este, NO merece mi respeto"; omitió la negación). Respecto de lo otro, no, no me acuerdo Ugo, tú sí ¿? No recuerdo las marchas gays que exigían respeto y políticas publicas de respeto a la integridad, pero sé bien que he participado en unas en las que lo importante es decir "aquí estamos", porque me parece que si hay algún objetivo en la marcha es antes que otra cosa decir "aquí estamos", porque desgraciadamente hay que irrumpir violentamente en vida del resto para que no puedan negar nuestra existencia, más allá de si existe o no una comunidad, lo importante es hacer ver que existimos, y sí, necesariamente de forma violenta, de otra manera nadie reparara en ello… sobre quien sale ganando en realidad, bueno, tú me dirás…

No bloqueo a los manifestantes Gerardo, y mucho menos hago propaganda contra ellos. Te lo digo a ti, me parece basura.

Pues bueno Ugo… a mi me resta hacerte una pregunta, o varias… por qué sí marchar en Madrid y no en México… porque el PSOE si va acompañando la marcha y el PRD no, o porque efectivamente la marcha en Madrid está cooptada por ese partido y acá no… y Ugo, quién gana allá, o te parece que en Chueca viven puras personas comprometidas con la causa homosexual… acaso no sabes el precio de los pisos en ese barrio y quienes son quienes al final se llevan las ganancias… mmm, me das mucho a pensar, o acaso es sólo que es más glam marchar por Madrid que por la ciudad de México…

¿Dónde dejaste tu crítica cuando marchaste por Madrid?

1 comentario:

Pável dijo...

Me adhiero. De hecho pensaba volcar en un texto mucho de lo que expones en este texto, pero veo que ya no es necesario, ja.